Indígenas y científicos colaboran para proteger al ajolote de montaña en la Sierra Norte de Puebla, especie endémica de México que enfrenta peligro de extinción por pérdida de hábitat, contaminación y sobreexplotación.
La iniciativa es impulsada por investigadores del Instituto de Biología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), junto con curanderos tradicionales y organizaciones locales. El objetivo del proyecto es conservar al ajolote de montaña —una especie de salamandra con valor simbólico, medicinal y ecológico— mediante estrategias como la reproducción en cautiverio, la restauración de ecosistemas y la educación ambiental.
Ajolote de montaña, especie sagrada
El ajolote de montaña es un anfibio endémico de regiones montañosas del centro del país, particularmente de la Sierra Norte de Puebla. Su capacidad para regenerar extremidades y órganos lo ha convertido en un símbolo de curación para comunidades indígenas, especialmente las de origen náhuatl.
Estas comunidades lo consideran un ser sagrado y lo han utilizado en prácticas de medicina tradicional por generaciones. Su uso como supuesto remedio natural, sumado a la falta de regulación, ha incrementado la presión sobre sus poblaciones.