México 12 abril._ Cifras indican que la población silvestre del ajolote que sobrevive es muy pequeña. Aunque son difíciles de evaluar, se estima que se han capturado menos de 100 individuos. Tan sólo entre 2002 y 2003, se realizaron más de 1,800 lanzamientos netos a lo largo de los canales de Xochimilco, que cubre 39 mil 173 m2 y sólo se capturaron 42 ejemplares, informó la Conabio.
Los individuos del ajolote mexicano no están distribuidos homogéneamente a través de su rango y se congregan en lugares particulares. Estudios que han abarcado un periodo de seis años (de 1998 a 2004), señalan que la densidad del ajolote mexicano se ha reducido de 0.006 org/m2 a 0.001 org/m2.
No obstante, autoridades indican que todavía se encuentran animales capturados en el mercado local, lo que indica que los pescadores aun saben dónde encontrarlos.
Hasta hoy, no se han realizado estudios de densidad de la población de Chalco.
También se ha observado una interrupción hormonal causada por contaminantes químicos que puede causar un desarrollo reproductivo anormal en los anfibios, lo que interrumpe el reclutamiento en poblaciones naturales.
Destrucción del hábitat
El hábitat del ajolote mexicano está completamente transformado, ya que mucho de éste ha desaparecido o se encuentra fragmentado considerablemente.
Datos de la Conabio muestran que alrededor del 85% de esta zona lacustre ha desaparecido debido a que han sido drenados y rellenados para urbanismo, del 15% que se conserva se utiliza en turismo. Presenta graves problemas de contaminación por la afluencia de visitantes a las chinampas y trajineras.
Además miles de casas vierten diariamente sus drenajes al lago sin ningún tratamiento. La acumulación de fertilizantes utilizados en las actividades agrícolas también es un problema.
Otro factor que pone en peligro a los ajolotes son los peces introducidos en el ecosistema, como la tilapia y carpa, los cuales ha impactado al anfibio mexicano debido a la depredación directa y la competencia por recursos.
Además, las enfermedades probablemente propagadas por especies invasoras y la mala calidad del agua, están afectando fuertemente las poblaciones de este ajolote. Uno de ellos es el hongo Batrachochytrium dendrobatidis, el cual es difícil de erradicar y ha infectado a poblaciones silvestres de ajolotes.