Mientras el deterioro de múltiples ecosistemas naturales es una constante en diversas zonas del país, numerosas iniciativas comunitarias, que se trabajan de manera continua y coordinada, han logrado revertir los daños ambientales en buena parte del bosque de la Mixteca Alta de Oaxaca.
“Las condiciones del sitio son muy variables porque la región es muy compleja en términos de la geología y el tipo de suelo. En largos periodos de tiempo en el pasado hubo mucha erosión debido al cambio de uso del suelo, principalmente por la ganadería. Pero en la zona del Geoparque de la Mixteca Alta, donde trabajamos, hay zonas de recuperación del bosque, procesos tanto naturales como propiciados por las comunidades”, explicó Quetzalcóatl Orozco Ramírez, investigador de Instituto de Geografía (IGg) de la UNAM, adscrito a la Unidad Académica de Estudios Territoriales Oaxaca (UAET).
Restauración del bosque
Expuso que las condiciones son de un bosque secundario que está en recuperación. Los procesos de restauración de un bosque toman varias décadas.
Los primeros trabajos del Geoparque se hicieron en 2013 para crear un expediente y se agrupó información ambiental de la zona y para 2018 tuvimos una labor más detallada para clasificar los diferentes tipos de vegetación tomando en cuenta datos científicos y el conocimiento de las comunidades.
El investigador comentó que desde que llegó la UNAM a la zona, en 2013, hasta ahora, los procesos de recuperación del bosque continúan.
“Varios factores han influido para ello, entre ellos un cambio en las actividades económicas principales de las comunidades, que han dejado de hacer ganadería extensiva (cada vez hay menos familias que tienen chivos que pastorean en el bosque) y ahora se dedican a otras actividades relacionadas con los servicios (atención a pequeños negocios, transporte, tiendas de telefonía e internet); a la educación o al comercio. Al diversificarse la economía ha bajado la presión sobre los recursos naturales”.