La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, a través del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP), puso en marcha sistemas termosolares para deshidratar alimentos y, de esta manera, reducir la pérdida y desperdicio y agregar valor a las cadenas agroalimentarias hortícolas en Zacatecas.
Esta acción se lleva a cabo a través del proyecto 319195 “Diseño, implementación y fortalecimiento de sistemas de energía solar para mitigar la pérdida de productos agrícolas y revalorizar cadenas hortícolas en Zacatecas”, parcialmente financiado por el Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías (CONAHCYT), en colaboración con el INIFAP principalmente.
Energías limpias
Participan también la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Universidad Autónoma Chapingo (UACh), Colegio de Postgraduados (Colpos), Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ), Universidad de Guadalajara (UDG), Secretaría del Campo del Gobierno de Zacatecas, Banco de Alimentos y Soluciones Integrales en Tecnologías Sustentables.
El especialista del Centro de Investigación Regional Norte Centro (CIRNOC) del INIFAP, Jorge Zegbe Domínguez, informó que con este proyecto se han implementado y consolidado tecnologías para captar energías limpias y con ello alargar la vida útil de alimentos con bajo valor comercial y/o en proceso de deterioro.
Esta acción permite acercar a los productores agropecuarios al uso de energías limpias para elaborar nuevos productos y promoverlos en nichos de mercados especializados y, por tanto, mejorar los ingresos económicos a los productores del campo de Zacatecas, acentuó.
Se desperdician más de 10 mil toneladas de alimentos cada año
Datos del Grupo Técnico de Pérdidas y Merma de Alimentos de la Cruzada Nacional Contra el Hambre revelaron que en México se desperdician más de 10 mil toneladas de alimentos cada año. Y representan 37 por ciento de la producción agropecuaria, los cuales podrían ser aprovechados para alimentar a mexicanos en pobreza extrema.
Además, la pérdida de alimentos contribuye negativamente a la emisión de gases de efecto invernadero, CO2 principalmente al deterioro y desperdicio de recursos naturales como agua y suelo, principalmente.