Autoridades ambientales de Paraguay investigan las causas de que un pequeño lago se tiñera de rojo, mientras los lugareños apuntan a efluentes de talleres de cuero que operan con ganado vacuno en sus orillas
La llamada Laguna Cerró, una de tantas que se forman como meandros del río Paraguay en una vertiente donde el curso de agua hace una curva antes de alcanzar Asunción, era cristalina hasta hace unos meses.
“Hemos tomado muestras para descubrir los tipos de contaminantes que tiene este lago. Es muy extraño el color que tomó el agua”, dijo el ministro del Medio Ambiente, Ariel Oviedo.
La jefa de laboratorio del ministerio, Rosa Morel, sostuvo que de las primeras muestras “se observan indicios de contaminantes químicos y orgánicos”
“Definir el tipo de contaminante es clave para orientar la recuperación del agua”,
el color del agua responde a la presencia de metales pesados como hierro, cromo y zinc, entre otros
Los vecinos atribuyen directamente la contaminación a grandes descargas de efluentes provenientes tanto de industrias cercanas como del barrio Piquete-Cué de la localidad de Limpio.
“De verde el agua se fue clareando hasta tomar un color rosado hasta quedar hoy completamente rojo”, explicó Cristina Ruiz una habitante del lugar.