El satélite SWOT registró el tsunami asociado al temblor de magnitud 8,8 del 30 de julio, ocurrido frente a la costa de la península rusa de Kamchatka, unos 70 minutos después del terremoto.
Los datos de esta misión conjunta entre la NASA y su homóloga francesa, el CNES, proporcionaron una perspectiva multidimensional del borde de ataque de la ola del tsunami provocada por el terremoto de Kamchatka.
Las mediciones incluyeron una altura de ola superior a 45 centímetros, que se muestra en rojo en la trayectoria resaltada en la imagen, así como una visión de la forma y la dirección de desplazamiento del borde de ataque del tsunami.
Los datos de SWOT (Surface Water and Ocean Topography), que se muestran en la franja resaltada que va del suroeste al noreste en la imagen, se comparan con un modelo de pronóstico del tsunami elaborado por el Centro de Investigación de Tsunamis de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) de EE.UU. Comparar las observaciones de SWOT con el modelo ayuda a los pronosticadores a validarlo, garantizando así su precisión.
Perturbaciones como un terremoto o un deslizamiento submarino desencadenan un tsunami cuando el evento es lo suficientemente grande como para desplazar toda la columna de agua de mar desde el fondo del océano hasta la superficie. Esto produce olas que se extienden desde la perturbación, de forma similar a como se genera una serie de olas al arrojar una piedra a un estanque.
Fuente: europapress.es