Ciudad de México 27 de junio de 2021._ Las gigantescas impresoras 3D construyen edificios de manera automática y con una mínima intervención humana, depositando –una sobre otra– decenas de capas de materiales maleables que después se solidifican.
Estas máquinas pueden ayudar a que la vivienda sea más asequible en muchos lugares y a construir barrios impresos con singular rapidez y a un costo bajo.
De hecho, se están multiplicando en todo el mundo los proyectos con la denominada tecnología aditiva, que permite construir grandes estructuras tridimensionales sólidas a partir de un modelo digitalizado con materiales como el hormigón.
Ahora, dos firmas italianas –una de arquitectura y otra tecnológica– están experimentando con una nueva forma de conseguir que el proceso de impresión en 3D sea todavía menos costoso y más sostenible para el medioambiente.
Estas utilizan un material de construcción económico y fácilmente disponible: el suelo de la zona donde se ha construido.
Esta “casa de aspecto salvaje” –como la describe la revista de tendencias Fast Company– se denomina Tecla (sigla derivada de technology and clay, es decir, tecnología y arcilla, en inglés) y es “el primer modelo de casa ecosostenible impresa en 3D completamente a partir de tierra cruda local”, según sus diseñadores y constructores.
Con información de: eltiempo.com