México 25 noviembre._ “México tiene un gran número de investigadores con viajes a la Antártica y esta es la oportunidad para que EU impulse el Tratado Antártico que busca preservar una Antártida que promueve la paz”, dijo Jerónimo López, profesor emérito de la Universidad Autónoma de Madrid.
La visita a México del científico, quien ha pisado 12 veces la Antártida, se enmarca en el programa del SCAR Visiting Scholar, en coordinación con la Agencia Mexicana de Estudios Antárticos (AMEA), representante del país ante el SCAR.
Formar parte del tratado Antártico le permitiría a México, según sus promotores, situarse en el centro de los paneles mundiales de discusión en cambio climático y desarrollo tecnológico para la generación y administración sustentable de recursos naturales.
Climas extremos
El estudio de los extremófilos y otros microorganismos presentes en zonas con climas extremos como la Antártica permiten el mejor entendimiento de la evolución de la vida y de los propios ecosistemas como el desierto mexicano.
Jerónimo López Martínez ha trabajado con investigadores nacionales de diferentes instituciones para impulsar el desarrollo de una ciencia antártica robusta que apoye los trabajos encaminados por la Agencia Mexicana de Estudios Antárticos.
Eso, para que el país se adhiera al Tratado Antártico, un símbolo de paz y de cooperación internacional. Cuenta con 55 países miembros y consiste en la colaboración para mantener las condiciones de parque natural del continente, y así abrir las puertas a todos los científicos de diversos países.
“La Antártida ha sido el último de los continentes en ser descubierto y colonizado por los humanos. Es, por un lado, el más frío, ventoso e inhóspito que existe y, por otro, el más inaccesible desde los centros de expansión de las civilizaciones”, afirma López Martínez.
El Tratado Antártico está conectado con sistemas internacionales de Naciones Unidas y adherirse a él sería un impulso para la propia AMEA y la comunidad científica.