En un nuevo artículo, Tom Battin, profesor de la Escuela Politécnica Federal de Lausana (EPFL), revisa nuestros conocimientos actuales sobre los flujos de carbono en las redes fluviales del mundo.
Demuestra su papel central en el ciclo global del carbono y aboga por la creación de un Sistema Mundial de Observación de los Ríos.
Hasta hace poco, nuestra comprensión del ciclo global del carbono se limitaba en gran medida a los océanos y los ecosistemas terrestres del mundo. Tom Battin, que dirige el Laboratorio de Ecosistemas Fluviales (RIVER) de la EPFL, ha arrojado ahora nueva luz sobre el papel clave que desempeñan las redes fluviales en nuestro mundo cambiante. Estos hallazgos se exponen en un artículo de revisión encargado y publicado en Nature.
Battin, profesor titular de la Escuela de Arquitectura e Ingeniería Civil y Medioambiental (ENAC) de la EPFL, obtuvo la colaboración de una docena de expertos en la materia para el artículo.
La importancia crucial de los ecosistemas fluviales
Por primera vez, su investigación combina los datos más recientes para demostrar la importancia crucial de los ecosistemas fluviales para los flujos globales de carbono, que incluyen la tierra, la atmósfera y los océanos.
En su artículo, los autores destacan el papel del metabolismo global de los ecosistemas fluviales. «Los ecosistemas fluviales tienen un metabolismo mucho más complejo que el del cuerpo humano», explica Battin.
«Producen tanto oxígeno como CO₂ por el efecto combinado de la respiración microbiana y la fotosíntesis de las plantas. Es importante conocer a fondo los mecanismos subyacentes, para poder evaluar y cuantificar el impacto del metabolismo del ecosistema en los flujos de carbono».