Entre diciembre de 1811 y febrero de 1812, se produjeron tres terremotos con magnitudes superiores a 7 en la zona sísmica de New Madrid, que abarca el sureste de Missouri, el noreste de Arkansas y las partes vecinas de Tennessee y Kentucky.
El último de estos terremotos, el 7 de febrero de 1812, con epicentro cerca de New Madrid, Missouri, fue especialmente notable: desvió temporalmente el río Mississippi, represó permanentemente el río Reelfoot y dirigió agua para llenar un área baja para formar el lago Reelfoot.
Más de dos siglos después, el lago Reelfoot sigue siendo una característica persistente en el paisaje de Tennessee. El OLI-2 (Operational Land Imager-2) del Landsat 9 capturó esta imagen del lago, los humedales circundantes y el cercano río Mississippi el 27 de noviembre de 2023.
Los ríos que corren sobre fallas son susceptibles de detenerse abruptamente y torcerse cuando el suelo se mueve.
Ríos inducidas por terremotos
A lo largo de la historia se han documentado avulsiones de ríos inducidas por terremotos, o cambios repentinos de curso.
En 2016, por ejemplo, el terremoto de Kaikōura en Nueva Zelanda efectivamente represó el Waiau Toa (río Clarence) y lo obligó a tomar un cauce completamente nuevo.
En el caso del terremoto que formó el lago Reelfoot, la tradición dice que el temblor incluso hizo que el Mississippi fluyera en sentido inverso durante un tiempo.
Sin embargo, eso puede haber sido una ilusión de las ondas de agua generadas por un terremoto que viajaban río arriba.
El temblor prácticamente destruyó la pequeña ciudad de New Madrid, en Missouri. Testigos presenciales cerca del epicentro también describieron árboles arrancados de raíz y el suelo subiendo, cayendo y abriéndose. Personas en ciudades distantes como Boston, Detroit y Nueva Orleans informaron haber sentido el temblor.
Algunos geólogos consideran que la zona sísmica de New Madrid es la región sísmica más peligrosa al este de las Montañas Rocosas. Sin embargo, su historia de grandes terremotos y el riesgo de futuras actividades destructivas siguen siendo fuentes de investigación y debate.
Fuente: tiempo.com