Armando González Sánchez y Juan Manuel Morgan Sagastume, científicos del Instituto de Ingeniería (II) de la UNAM, crearon un eliminador híbrido de malos olores (EHLMO), útil en plantas de tratamiento de aguas residuales y en rellenos sanitarios o alcantarillados.
La innovación, que obtuvo el título de patente por el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial, suprime los aromas generados en plantas de tratamiento de aguas residuales, drenajes, lumbreras y especialmente puede ser usado para desulfurar el biogás, razón por la cual es posible darle un nuevo uso: apoyar a la generación de energía limpia y renovable.
Los investigadores universitarios explicaron que el progreso tecnológico es único en México y Latinoamérica, y de menor costo que los elaborados en países desarrollados, por lo que sus beneficios son múltiples.
EHLMO es producto de varios años de investigación y de gran experiencia acumulada, que complementa un paquete tecnológico de la Universidad en la materia.
La meta es el manejo adecuado de gases para que no tengan impactos negativos y se puedan aprovechar, en especial en un biogás que es una mezcla primordialmente de metano, dióxido de carbono y en menores cantidades sulfuro de hidrógeno (H2S). Este último compuesto es el causante del mal olor y también corroe los equipos empleados para la generación de energía, por ello debe ser eliminado, detalló Morgan Sagastume.
Hidrógeno
Se pensó, abundó González Sánchez, en un proceso de desulfuración o eliminación del sulfuro de hidrógeno del biogás utilizando un reactivo optimizado y regenerable basado en fierro. “El H2S se elimina y, químicamente hablando, se oxida parcialmente a azufre elemental”.
Al recuperar este último, EHLMO obtiene el sulfuro de hidrógeno como azufre, es decir, un sólido que se separa fácilmente del líquido y que, a su vez, se puede aprovechar en otras industrias, como la cosmética. “Lo que era un gas apestoso se transforma en un sólido que se recupera para darle otros usos”, destacó.
Después de aprobar exitosamente las pruebas en laboratorio, el eliminador de olores pasó también las evaluaciones piloto, y “desulfura muy bien”, aseveró el doctor en ingeniería.