El consumo de ácido fólico antes y durante el embarazo y no exponerse al humo de tabaco u otros contaminantes, así como no consumir ciertos fármacos que generan malformaciones, pueden evitar los defectos del tubo neural en el feto, refiere el artículo Defectos al nacimiento: Defectos de tubo neural y craneofaciales, publicado en el Boletín Epidemiológico de la primera semana de 2024 https://bit.ly/3U4XlI8
El documento que emite la Dirección General de Epidemiología (DGE) de la Secretaría de Salud precisa que las mujeres en edad fértil deben consumir 400 microgramos diarios de ácido fólico para la prevención de defectos del cierre del tubo neural; en tanto, las personas embarazadas y sus parejas que vivan con algún defecto del nacimiento, historia familiar o antecedente de hijas e hijos con defectos del tubo neural o que viven en las zonas geográficas de mayor incidencia de estas alteraciones deben tomar cuatro miligramos al día de dicha vitamina.
El ácido fólico, también conocido como folato o vitamina B9, debe tomarse al menos durante tres meses antes del embarazo para prevenir hasta 70 por ciento los defectos congénitos del cerebro y la columna vertebral del feto.
Asimismo, es fundamental que la persona en estado de embarazo acuda de forma mensual para el control médico como medida preventiva desde el primer trimestre, para identificar posibles riesgos en fase temprana y establecer tratamientos oportunos, con el propósito de que haya mínimas secuelas y evolución satisfactoria tanto de la madre como del feto.