México.- Las bebidas de baja graduación alcohólica se han convertido en un agente aliado para impulsar el consumo moderado de alcohol entre jóvenes y adultos, interesados en productos que atienden a nuevas necesidades y estilos de vida, señalan expertos.
A decir por la International Wines and Spirits Record (IWSR) de Londres, desde 2018 se ha generado una creciente tendencia hacia el consumo de productos como cerveza sin o con bajo contenido de alcohol.
Prueba de ello, es el crecimiento del 6% en el consumo de bebidas con bajo nivel alcohólico en países como Australia, Brasil, Canadá, Francia, Alemania, Japón, Sudáfrica, España, Reino Unido y Estados Unidos, que, de acuerdo IWSR, representan los mercados mundiales clave de 2021, así como el aumento del 3.5% de esta industria de manera general en el mundo.
«Para satisfacer esa demanda, las empresas de bebidas alcohólicas han invertido mucho para introducir una serie de productos nuevos e innovadores, y muchas marcas convencionales establecidas han pasado recientemente a desarrollar versiones sin o con bajo nivel de alcohol de sus populares cervezas, vinos y licores”, revela Emily Neill, COO de IWSR, Drinks Market Analysis.
La clave es la moderación
A decir por la especialista, la moderación es el uso más común de los productos que contienen poco nivel alcohólico, con un importante diferencia entre los consumidores de estos productos y los consumidores de alcohol.
Entre los adultos que han comprado productos con poco alcohol, prevé que el 37% de las personas están conscientes del consumo en exceso, por lo que la razón para consumir este tipo de bebidas es evitar los efectos del alcohol, mientras que el 30% de los bebedores lo atribuyen a que les gusta el sabor.
Como parte de la “Estrategia Global para Reducir el Uso Nocivo de Alcohol”, la Organización Mundial de la Salud (OMS), impulsa políticas que motiven a los consumidores a ingerir bebidas de menor graduación alcohólica por su efectividad en la reducción de los daños a la salud y el combate al crecimiento de mercados ilícitos.
Asimismo, especialistas de diversos rubros han destacado, que políticas como las fiscales, en las que se busca hacer una marcada diferenciación entre las bebidas de baja y alta graduación alcohólica, son necesarias para revertir las cifras de daños ocasionados a la salud por el consumo excesivo de alcohol.
«El mercado de las bebidas sin alcohol y de bajo contenido alcohólico se encuentra todavía en su fase inicial de crecimiento en muchas categorías y zonas geográficas, ya que el sector sigue definiéndose. Las marcas que acabarán dominando el espacio serán las que consigan superar las barreras del sabor, el precio, el formato del envase, la disponibilidad y la educación general del consumidor”, añade Neill.
El caso de México
En el caso específico de México, también sobresale una tendencia hacia el consumo de este tipo de bebidas. De acuerdo con la consultora Euromonitor International, el volumen total de cervezas sin o bajo alcohol creció un 56.2%, de 2013 a 2018 con un crecimiento anual constante de 9.3%, y se espera que para 2023 tenga un crecimiento del 43.6%.
El segmento de las cervezas sin alcohol representa el 0.1%, en un mercado de 87 millones de hectólitros en México, frente a países como Rusia, que tiene el 2%, Holanda el 6% y España el 8%.
A decir por Yanira Reyes, líder de Analytics de Nielsen IQ, la tendencia del consumo moderado de alcohol y el aumento de la ingesta de bebidas con bajo nivel alcohólico seguirá en crecimiento, debido también a la proliferación de una cultura de cuidado personal y moderación.
“Van a seguir creciendo los productos en México, todos se suman a la tendencia wellness. Las bebidas sin alcohol están creciendo a doble dígito. Las cervezas ligeras, que son un segmento también muy nuevo, crecen 40% en los autoservicios, Las tendencias de salud y bienestar han impactado en numerosas industrias y hábitos de consumo a nivel global. Es una tendencia muy marcada y es un paso hacia la innovación recientemente explorado en el país”, declara Reyes.
Baja graduación alcohólica
Finalmente, los expertos coinciden en los daños a la salud propiciados por el consumo de bebidas con alto contenido alcohólico, entre los que destacan intoxicaciones, daños renales, hepáticos, choques, accidentes, violencia, agresiones y muertes.
TE RECOMENDAMOS VER
Industria de la moda es la segunda más contaminante del mundo