Productores, industriales y comercializadores de café, junto con servidores públicos de las secretarías de Agricultura y de Bienestar, así como del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP), acordaron crear la Comisión Nacional para el Desarrollo de la Cafeticultura Mexicana.
El objetivo del nuevo organismo es atender –en acuerdos por consenso y con visión de cadena— los desafíos de esta rama productiva, en particular el de elevar la productividad para la autosuficiencia nacional en volumen y calidades, además de aprovechar oportunidades de crecimiento en mercados maduros y emergentes en el exterior, bajo equilibrios de ganar-ganar en toda la cadena y, en particular, en la actividad primaria.
En la primera reunión de concertación público-privada con el Comité Nacional Sistema Producto Café, las partes acordaron que en el seno de la Comisión se abordarán temas relevantes para todos los eslabones como productividad, resiliencia, comité de precios de referencia, sanidades, inclusión, paridad de género, arraigo y programa de normalización, en el marco de la Ley de Infraestructura de la Calidad.
Caficultura sustentable
En seguimiento al programa sectorial, impulsado por el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Víctor Villalobos Arámbula, esta Comisión busca atender los aspectos integrales relacionados con una caficultura sustentable, resiliente y competitiva que permita mejorar los ingresos de las familias productoras del aromático, de manera prioritaria de pequeños productores y poblaciones vulnerables, con sentido de justicia social y desarrollo territorial que traiga bienestar a las zonas cafetaleras del país y, con ello, contribuya a dar valor a las marcas de las empresas sociales y privadas.
En reunión presidida por el subsecretario de Autosuficiencia Alimentaria, Víctor Suárez Carrera, y el coordinador general de Agricultura, Santiago Arguello Campos, se convino generar dos grupos de trabajo encaminados, uno, a establecer un sistema de información de la caficultura nacional, que incluya la definición consensuada y de seguimiento de precios de referencia del café por regiones y calidades y que brinde información transparente a los participantes de esta cadena para la toma de decisiones, con el fin de mejorar y hacer más eficiente la comercialización y su gestión del riesgo.