Durante siglos, las presas han sido aliadas para almacenar agua y producir energía limpia.
Sin embargo, también han generado un impacto importante en la vida de los ríos, especialmente en el desplazamiento de los peces.
Ahora, un grupo de investigadores irlandeses ha creado una solución que podría cambiar el futuro de estas estructuras: un sistema capaz de generar energía limpia y, al mismo tiempo, permitir que los peces suban y bajen por el río sin sufrir daños.
Una barrera que funciona como puerta giratoria
El invento funciona de manera similar a una puerta giratoria.
Cuando detecta que hay peces cerca, se ajusta para permitir su paso, y después vuelve a operar como turbina generadora de energía.
Esto resulta ideal en un momento en que la Unión Europea impulsa leyes para restaurar los ecosistemas fluviales y eliminar barreras, aunque desmontar presas sigue siendo costoso y poco práctico.
Patrick Morrissey, del Trinity College, explica que el objetivo fue crear un sistema que cumpliera una doble función: elevar peces de manera segura y generar electricidad mediante una bomba-turbina respetuosa con la fauna.
¿Cómo funciona este sistema?
El dispositivo, llamado BMS, combina una bomba centrífuga de tornillo —tecnología usada desde los años 50 para transportar peces vivos— con una turbina que opera en sentido inverso cuando debe generar energía. Así:
En modo turbina, produce electricidad con el flujo natural del agua.
En modo bomba, impulsa a los peces río arriba sin dañarlos.
El sistema incluye sensores ópticos e infrarrojos que detectan cuándo se han agrupado suficientes peces.
En ese momento, reduce la velocidad, cambia de modo y facilita su paso. Luego, retoma la generación de energía.
Además, cuenta con un sistema de almacenamiento de energía que permite operar sin estar conectado a la red eléctrica cuando es necesario.
Resultados prometedores para energía limpia
Las pruebas realizadas en una piscifactoría de Irlanda demostraron que el sistema es seguro: menos del 3% de lesiones en más de 2,300 anguilas y ninguna muerte registrada.
Aunque aún quedan por realizar pruebas mientras la turbina opera a máxima potencia, los resultados iniciales son muy positivos.
El BMS también podría reducir entre 50% y 85% los costos asociados a la modificación o restauración de barreras fluviales, lo que lo convierte en una alternativa atractiva frente a la eliminación total de presas.
Este invento abre una nueva posibilidad: aprovechar la energía limpia de los ríos sin comprometer la vida que habita en ellos.
Una tecnología que podría marcar un antes y después en la relación entre infraestructura y naturaleza.
Con información de El Español.
