El año 2020 marca el inicio del Decenio de Acción para cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible (SDG), que combaten la pobreza, la desigualdad y la injusticia y el cambio climático para 2030. Tras el éxito de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, los SDG se han adoptado como parte de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, firmada por 193 países.
Los SDS constan de 17 objetivos y 169 metas, como la eliminación de la pobreza y el hambre, la lucha contra el cambio climático, el apoyo al trabajo decente y el crecimiento y la creación de ciudades y comunidades sostenibles. Para muchas empresas, alinearse con los SDG es la siguiente gran manera de tener un impacto positivo como organización y atraer dólares de inversión de inversores cada vez más activos en el clima.
En este artículo, Irina Gilfanova de Schneider Electric Energy & Sustainability Services detalla cómo las empresas pueden utilizar los SDG para impulsar el cambio organizativo.
El reciente aumento de los compromisos e iniciativas mundiales para el desarrollo sostenible, como el compromiso de la Alianza de Inversores Mundiales para el Desarrollo Sostenible (GISD) de invertir en los SDG y reforzar las acciones de los SDG en sus carteras, requiere ahora que las empresas realicen la evaluación de los SDG para sus negocios y desarrollen una estrategia de respuesta. Según un estudio de KPMG sobre la presentación de informes sobre los SDG en 2018, el 84% de las principales empresas han identificado los SDG más relevantes para sus negocios.
- Los SDG son cada vez más importantes para los inversores, ya que representan una perspectiva material de ESG (ambiental, social y de gobierno) que los inversores tienen en cuenta como parte de su deber fiduciario.
- Hay un fuerte argumento comercial para invertir en empresas alineadas con los SDG, que se ha demostrado que aseguran un rendimiento constante para los inversores al crear una ventaja competitiva de su cartera.
- Un informe titulado «Better Business, Better World» (Mejores negocios, mejor mundo) de la Comisión de Negocios y Desarrollo Sostenible reveló que los modelos de negocios relacionados con los SSD podrían abrir oportunidades por un valor de hasta 12 billones de dólares y aumentar el empleo en hasta 380 millones de puestos de trabajo para 2030.
Por ejemplo, en 2018, el Banco Mundial, BNP Paribas, y el banco privado suizo, SYZ, se asociaron para ofrecer un bono de capital que vinculara los rendimientos de las inversiones con el desempeño de las empresas en consonancia con los SDG.
El rendimiento de la inversión del bono está directamente vinculado al rendimiento de las acciones de las empresas incluidas en el Índice Mundial de VM de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Solactive. Según el informe publicado por el PRI y la ONU en 2018, el 82% de los signatarios del PRI que informaron sobre los efectos de los factores ASG después de la integración dicen que afectó sus decisiones de compra/venta.
Los SSE sirven de marco universal para que las empresas comuniquen sus resultados, establezcan objetivos y medidas, se comprometan con los diversos interesados, incluidos los inversores, y obtengan acceso a nuevas oportunidades de mercado. El marco fomenta la colaboración para resolver las tareas más difíciles del mundo en materia de sostenibilidad. Las empresas que deseen perseguir los objetivos de desarrollo sostenible y los beneficios que éstos aportan deben seguir una serie de pasos a fin de maximizar la oportunidad.
¿Cómo puede su empresa alinear su estrategia con el marco de los SDG?
- 1. Comprender los SDG y vincular los objetivos relevantes a sus actividades empresariales
El primer paso para las empresas en su viaje hacia el SDG es aprender más sobre cada uno de los objetivos, las metas relevantes y los KPI para ver cómo se relacionan directa e indirectamente con sus actividades comerciales.
Por ejemplo, Schneider Electric conectó sus actividades comerciales con los 17 objetivos a través de 5 megatendencias: Clima, Economía Circular, Ética, Salud y Equidad, y Desarrollo.
- 2. 2. Definir las prioridades
Las empresas deberían dar prioridad a los objetivos de los SDG considerando cuáles serán los que tengan mayor impacto en términos de riesgo u oportunidad a mediano y largo plazo y cuáles son los objetivos en los que la empresa tiene la capacidad de contribuir para lograr avances. Puede ser que una empresa esté contribuyendo a los 17 objetivos, pero cuando se asignen recursos y se defina el calendario, es importante empezar por los objetivos que tengan mayor repercusión.
Por ejemplo, la empresa tecnológica china Huawei trabajó activamente en la elaboración del parámetro de referencia de los objetivos de desarrollo sostenible de la tecnología de la información y las comunicaciones. Exploraron la relación entre las TIC y el desarrollo sostenible e identificaron los objetivos que guardan mayor correlación con los sectores de las TIC: SDG-4 – Calidad de la educación, SDG 3 – Buena salud y bienestar, SDG 9 – Industria, innovación e infraestructura. Estos puntos de referencia sectoriales pueden utilizarse como primer paso para que la empresa comprenda sus repercusiones en los diferentes objetivos.